Open Wounds
En el sueño recuerdo que despertaba pensando que ya había ido al laboratorio pero no lograba recordar cómo había sido el proceso de la toma de sangre ni cómo había regresado a casa, incluso ya era de noche cuando despertaba porque estaba oscuro y se supone que yo había ido muy de mañana. Al ver mi brazo encontraba dos heridas muy profundas, una de ellas además era grande y estaba abierta, tanto que podía ver el tejido interno. Salía entonces de la recámara y después de un rato de no ver a nadie encontraba a mi marido, así que le preguntaba si él se había dado cuenta cómo había llegado a la casa y si sabía por qué tenía una herida tan grande en el brazo, ya bastante desesperada por no lograr recordar nada. Él se quedaba callado un momento y después me decía que qué bueno que no lo recordaba porque había sido horrible pues alguien sin experiencia al no poder tomar la muestra de sangre decidió abrir mi brazo a fin de encontrar una vena y yo entonces me había desmayado del dolor y la impresión, por eso lo habían llamado a él y yo no recordaba nada más. Estaba tan impresionada por lo que había pasado que en ese momento "desperté", volteé a ver a mi esposo y le conté que había tenido un sueño horrible, aún estaba la habitación a oscuras así que supuse que era muy temprano todavía, sin embargo busqué el celular para revisar la hora y me di cuenta en ese momento que eran 8:59 am, cuando tenía que despertar a las 7 por que mi cita era entre 7:30 y 8:30, así que había perdido mi cita para los estudios. Fue tan frustrante la situación que ahora sí desperté de verdad, al menos a esta realidad en la que escribo esto después de haber cumplido satisfactoria y puntualmente mi asistencia al laboratorio clínico y en la que no hubo ni heridas horribles, ni desmayos ni alarmas que nunca sonaron. Incluso desperté tan a tiempo que tuve tiempo de ver una buena parte de la final femenil de Gimnasia Artística de Tokio 2020 (aunque hoy estemos en 2021).
Todo está bien. Todo está donde debe estar.
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