Cosas De La Vida
.
Bastantes días sin escribir. La verdad es que ya no encuentro tanto placer en escribir aquí como antes, incluso me da un poco de pereza. Quizá se deba a que en estos momentos mi vida es bastánte monótona, no hay acontecimientos que merezcan la pena ser registrados. Tampoco me refiero al hecho de que estén sucediendo cosas desagrabales, por el contrario: todo está en orden y bajo control, la vida es muy tranquila y todo se mueve dentro de una rutina. Sin embargo, antes disfrutaba hasta escribir sucesos cotidianos e insignificantes, pero ahora eso me parece inútil y prefiero utilizar ese tiempo en otras cosas. Otra razón de mi ausencia por acá es que cada día le dedico más tiempo al trabajo y eso me deja con menos horas de ocio y pocas ganas de pensar y escribir en esas horas. Supongo que eso significa que pasaré cada vez menos tiempo en éste sitio hasta que recupere mi antigua pasión por escribir (si es que tal cosa sucede), sin embargo no me gustaría cerrar el blog pues quizá de vez en cuando encuentre por ahí un poquito de inspiración y me decida a venir.
Solamente hay una cosa que me animó a crear un post hoy:
Una boda
No, no mi boda. Aunque estoy a punto de cumplir 26 años no tengo la menor intención de casarme, y sinceramente dudo tenerla algún día. Pero, ¿entonces de quién es la boda? De un amigo. De hecho es más amigo de mi hermano que mío, sin embargo que está relacionado conmigo indirectamente por acontecimientos sucedidos hace algunos años. Antier me enteré que en un mes se casa y me tomó por sorpresa la noticia. Para mí él era uno de los amigos que menos imaginé ver casado tan ¿pronto? Pronto para mí, pero creo que la que está fuera de contexto soy yo, porque ya en varias parejas de amigos se escucha la palabra "matrimonio". Como sea, él me daba la impresión de ser hasta incasable y resulta que en un mes será la ejecución. Está claro que asistiré a la boda, no porque me entusiasme mucho un evento de ese tipo sino porque es un evento digno de presenciar, un amigo que se casa siempre invita a pensar sobre los planes y perspectiva de vida propios. Eso sí, juro que no iré cuando me invite al bautizo de su segundo hijo (tiene ya un hijo con otra chica).
Vaya... ni siquiera sé cómo terminar éste post... Quizá lo mejor sea decir que espero escribir pronto. Gracias por leer!!
.
Bastantes días sin escribir. La verdad es que ya no encuentro tanto placer en escribir aquí como antes, incluso me da un poco de pereza. Quizá se deba a que en estos momentos mi vida es bastánte monótona, no hay acontecimientos que merezcan la pena ser registrados. Tampoco me refiero al hecho de que estén sucediendo cosas desagrabales, por el contrario: todo está en orden y bajo control, la vida es muy tranquila y todo se mueve dentro de una rutina. Sin embargo, antes disfrutaba hasta escribir sucesos cotidianos e insignificantes, pero ahora eso me parece inútil y prefiero utilizar ese tiempo en otras cosas. Otra razón de mi ausencia por acá es que cada día le dedico más tiempo al trabajo y eso me deja con menos horas de ocio y pocas ganas de pensar y escribir en esas horas. Supongo que eso significa que pasaré cada vez menos tiempo en éste sitio hasta que recupere mi antigua pasión por escribir (si es que tal cosa sucede), sin embargo no me gustaría cerrar el blog pues quizá de vez en cuando encuentre por ahí un poquito de inspiración y me decida a venir.
Solamente hay una cosa que me animó a crear un post hoy:
Una boda
No, no mi boda. Aunque estoy a punto de cumplir 26 años no tengo la menor intención de casarme, y sinceramente dudo tenerla algún día. Pero, ¿entonces de quién es la boda? De un amigo. De hecho es más amigo de mi hermano que mío, sin embargo que está relacionado conmigo indirectamente por acontecimientos sucedidos hace algunos años. Antier me enteré que en un mes se casa y me tomó por sorpresa la noticia. Para mí él era uno de los amigos que menos imaginé ver casado tan ¿pronto? Pronto para mí, pero creo que la que está fuera de contexto soy yo, porque ya en varias parejas de amigos se escucha la palabra "matrimonio". Como sea, él me daba la impresión de ser hasta incasable y resulta que en un mes será la ejecución. Está claro que asistiré a la boda, no porque me entusiasme mucho un evento de ese tipo sino porque es un evento digno de presenciar, un amigo que se casa siempre invita a pensar sobre los planes y perspectiva de vida propios. Eso sí, juro que no iré cuando me invite al bautizo de su segundo hijo (tiene ya un hijo con otra chica).
Vaya... ni siquiera sé cómo terminar éste post... Quizá lo mejor sea decir que espero escribir pronto. Gracias por leer!!
.
Comentarios